75 aniversario del asesinato de Garcia Lorca...in memoriam
Desde que García Lorca había caído, acribillado a balazos, en los albores de la guerra española, “La zapatera prodigiosa” no aparecía en los escenarios de su país. Muchos años habían pasado cuando los teatreros del Uruguay llevaron esa obra a Madrid.
Actuaron con alma y vida.
Al final, no recibieron aplausos. El público se puso a patear el suelo, a toda furia, y los actores no entendieron nada.
China Zorrilla lo contó:
— Nos quedamos pasmados. Un desastre. Era para ponerse a llorar.
Pero después estalló la ovación. Larga, agradecida. Y los actores seguían sin entender.
Quizás aquel primer aplauso con los pies, aquel trueno sobre la tierra, había sido para el autor. Para el autor, fusilado por rojo, por marica, por raro. Quizás había sido una manera de decirle: para que sepas, Federico, lo vivo que estás.
“Ventanas de España”. Eduardo Galeano.
Otro homenaje ,voz de la propia poesía de Federico y que tiene que ver con esa intolerancia de la verdad univoca e incontestable que sustenta la "supuesta" supremacia de la Iglesia católica sobre todo lo demás en la sociedad de antaño y en la de hoy.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, y convencerle de ello es misión poco menos que imposible, aunque uno ponga toda la fuerza del razonamiento, de la empatía y el diálogo en esto.
La poesía se titula GRITO HACIA ROMA; viene muy al caso, os invito a leerlo en este enlace :
http://www.masoneria-liberal.com/2011/08/recordando-garcia-lorca.html
Actuaron con alma y vida.
Al final, no recibieron aplausos. El público se puso a patear el suelo, a toda furia, y los actores no entendieron nada.
China Zorrilla lo contó:
— Nos quedamos pasmados. Un desastre. Era para ponerse a llorar.
Pero después estalló la ovación. Larga, agradecida. Y los actores seguían sin entender.
Quizás aquel primer aplauso con los pies, aquel trueno sobre la tierra, había sido para el autor. Para el autor, fusilado por rojo, por marica, por raro. Quizás había sido una manera de decirle: para que sepas, Federico, lo vivo que estás.
“Ventanas de España”. Eduardo Galeano.
Otro homenaje ,voz de la propia poesía de Federico y que tiene que ver con esa intolerancia de la verdad univoca e incontestable que sustenta la "supuesta" supremacia de la Iglesia católica sobre todo lo demás en la sociedad de antaño y en la de hoy.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, y convencerle de ello es misión poco menos que imposible, aunque uno ponga toda la fuerza del razonamiento, de la empatía y el diálogo en esto.
La poesía se titula GRITO HACIA ROMA; viene muy al caso, os invito a leerlo en este enlace :
http://www.masoneria-liberal.com/2011/08/recordando-garcia-lorca.html
De las viejas notas que suelo guardar y que a veces ordeno por efemérides he entresacado lo que afecta a la captura y posterior asesinato del escritor y poeta universal.Se cree que además fue masón en la logia Alhambra con el nombre, ¡como no! de Homero.
ResponderEliminarHe aquí lo que quería compartiros:
"La tarde del 16 de agosto de 1936,
Lorca fue detenido en casa de los Rosales por Ramón Ruiz Alonso, un ex
diputado de la CEDA, derechista fanático, que sentía un profundo odio por
Fernando de los Ríos y por el poeta mismo". Según Ian Gibson, biógrafo de
Federico, se sabe que esta detención "fue una operación de envergadura. Se
rodeó de guardias y policías la manzana donde estaba ubicada la casa de los
Rosales, y hasta se apostaron hombres armados en los tejados colindantes
para impedir que por aquella vía tan inverosímil pudiera escaparse la
víctima [Federico García Lorca, vol. II, p. 469] Lorca fue trasladado al
Gobierno Civil de Granada, donde quedó bajo la custodia del gobernador, el
comandante José Valdés Guzmán. Entre los cargos contra el poeta -según una
supuesta denuncia, hoy perdida y firmada por Ruiz Alonso- figuraban el "ser
espía de los rusos, estar en contacto con éstos por radio, haber sido
secretario de Fernando de los Ríos y ser homosexual [Federico García Lorca,
vol. II, p. 476]. Fueron infructuosos los varios intentos de salvar al poeta
por parte de los Rosales y, más tarde, por Manuel de Falla. Según Gibson,
"hay indicios de que, antes de dar la orden de matar a Lorca, Valdés se puso
en contacto con el general Queipo de Llano, jefe supremo de los sublevados
de Andalucía". Sea como fuere, el poeta fue llevado al pueblo de Víznar
junto con otros detenidos. Después de pasar la noche en una cárcel
improvisada, lo trasladaron en un camión hasta un lugar en la carretera
entre Víznar y Alfacar, donde lo fusilaron antes del amanecer. Aunque no se
ha podido fijar con certeza la fecha de su muerte, Gibson supone que ocurrió
en la madrugada del 18 de agosto de 1936. En documentos oficiales expedidos
en Granada puede leerse que Federico García Lorca "falleció en el mes de
agosto de 1936 a consecuencia de heridas producidas por hecho de guerra".